El Covid 19 ha tenido un impacto económico negativo a nivel mundial, algunos países entraron en recesión mientras otros luchan para poder mantener la estabilidad.
El sector construcción no está exento de esa realidad pues aunque hay rubros en la economía que no requieren necesariamente estar en un puesto de trabajo, en la mayoría de las fases de la construcción resulta ineludible.
El sector construcción es uno de los principales motores de la economía pues habilita una gran cantidad de trabajos, tanto directos como indirectos, que favorecen la reactivación de la economía una vez terminada la pandemia, por ello es tan importante estar atentos a los que ocurre mes a mes con este sector.
En algunos países, incluido Colombia, ya se han comenzado a reactivar el sector, en los grandes proyectos y en los pequeños, con los protocolos de bioseguridad pertinentes.
Por ejemplo, en el área de infraestructura y macro proyectos gubernamentales, la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) aseguró de los 45 contratos de obra activos que se tenía en el mes de febrero, al mes de junio se habían reiniciado 41, lo que corresponde a un 91,1%, con 35.460 puestos de trabajo.
Por su parte, en el área de construcción un 95% de las obras (en 2.605 proyectos que existen en Colombia) se encuentran activas. El gobierno pone grandes esperanzas en el sector e incluso afirma que la construcción se convertirá en uno de los ejes de la estrategia de recuperación y que para el 2022 podría generar en el país más de 1,3 millones de empleos.
Las empresas que se encuentre en el campo de la construcción pueden, además, invertir el tiempo en la planificación y el diseño de proyectos, captación de nuevos clientes a través de medios digitales, así como captación de personal, entre muchas otras cosas.
Hay que rescatar también que la pandemia trajo consigo el confinamiento, y el mismo puede ser usado para la capacitación, así como la actualización de las nuevas tendencias en el campo de la construcción de infraestructura.
