Imagen por Sadie Teper.
Eje de innovación – Buenos Aires
Buenos Aires es la capital y ciudad más grande (un área de 100 x 50 km) de Argentina, con una población de aproximadamente 14 millones de personas, de las cuales 4 millones carecen de una conexión al suministro de agua y 6,5 millones no cuentan con saneamiento. La población se ha multiplicado diez veces en los últimos 50 años. A pesar de esto, no ha habido inversión en alcantarillado y muchos utilizan soluciones sépticas que acaban siendo fuente de contaminación de aguas subterráneas. Cualquier infraestructura existente requiere de una revisión completa. Además, anteriormente no había habido planificación para el alcantarillado en la principal (pero también la más pobre) zona del área metropolitana.
La empresa dedicada a la prestación de servicios de agua corriente y cloacas, AySA (Agua y Saneamientos Argentinos) es el consumidor de energía número uno en Buenos Aires. Han instalado 25K de tuberías, de las cuales el 50% ha mostrado fugas. Según Pablo , el uso de medidores y tecnología digital "tiene el potencial de apoyar grandes mejoras en la eficiencia de la utilidad, pero también el de ofrecer un beneficio más amplio al sector energético del país". Por lo tanto, una transformación en la infraestructura de agua y saneamiento de AySA también resolvería el problema energético.
La propuesta del proyecto de Pablo (en diciembre de 2015) fue lanzar un proyecto a gran escala que incluiría a toda la población más vulnerable en el área urbana de Buenos Aires dentro de la red AySA. De esta forma, 4 millones de personas se sumarían a la red (es decir, se crearían 1,5 millones de nuevas conexiones) – en pasos progresivos: 1 municipio cada 45 días. "A gran escala" significaba realizar excavaciones de 60 metros de profundidad para instalar la red y un túnel de 12,5 kilómetros de largo y 5 metros de diámetro. Buenos Aires se convirtió en un campo de pruebas para la innovación. Pero, ¿cómo y de dónde provendría la financiación de este ambicioso proyecto? Por medio de una serie de formas/fuentes: el aumento en las tarifas, más cuentas conectadas, la eliminación de AySa del balance de Argentina (una decisión histórica), la emisión de un bono en la Bolsa de Londres (¡solicitaron 500 millones, pero recibieron 2.100 millones!).
Según Pablo, "la prioridad de un gobierno debe ser sus propios ciudadanos". Y también, en un país como Argentina, es importante estar conectados y abiertos al mundo – intercambiar ideas, crear modelos de negocio y soluciones tecnológicas innovadoras y establecer nuevas asociaciones privadas. Por ejemplo, Pablo señala que AIWW (La semana internacional del agua de Ámsterdam) “representa una oportunidad importante para llevar los aportes de Argentina al tema del agua.” “Vemos los Países Bajos y a Ámsterdam como los líderes en todo lo referente a infraestructura, sostenibilidad, cambio climático y agua,” comentó. “Apreciamos mucho la posibilidad de ser parte de este acontecimiento y también de utilizarlo como plataforma para compartir nuestras ideas, escuchar otras, y de explorar la posibilidad de crear alianzas en todo el mundo.”
Nos encontramos en un momento fascinante en el tiempo. Con posibilidades de avanzar hacia grandes desafíos. Es realmente el momento preciso para quienes estén dispuestos a innovar, y con un impacto social muy alto. Esto es lo que yo valoro más. También debo decir que realmente aprecio lo que Orbia y Wavin está haciendo. Estoy en contacto con Orbia/Wavin en México y Colombia, intercambiando ideas. Discutimos proyectos de infraestructura y creo que Orbia/Wavin es único en este sentido: con capacidades globales, una fuerte participación en LATAM e ideas importantes y de impacto en innovación
Pablo Bereciartua
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